"Vínculos y límites en adolescentes de Padres Separados: El rol de los hermanos mayores como aliados y el desafío para los padres"
- Pedro Valencia Iribarren

- 25 oct 2024
- 6 Min. de lectura
Actualizado: 2 nov
La adolescencia es una etapa compleja y determinante, en la que se desarrollan rasgos de personalidad y habilidades de afrontamiento ante situaciones difíciles, como la separación de los padres. En este contexto, los hermanos mayores suelen actuar como figuras de apoyo y modelos de conducta, fortaleciendo la alianza fraterna. Sin embargo, esta dinámica puede influir en cómo el adolescente percibe la autoridad, el respeto y los límites familiares. Para los padres, enfrentar esta situación implica adoptar estrategias que favorezcan el vínculo con sus hijos sin dejar de establecer límites.

1. Características de Personalidad de Adolescentes en Contexto de Separación Parental
Resiliencia y Adaptabilidad:
Enfrentar la separación de los padres lleva a muchos adolescentes a desarrollar una fuerte capacidad de resiliencia, adaptándose a los cambios y encontrando nuevas maneras de sobrellevar las emociones difíciles. Aquellos con hermanos mayores suelen apoyarse en esta relación para encontrar estabilidad y seguridad, utilizando la alianza fraterna como una forma de adaptarse al entorno familiar cambiante.
Independencia y Autonomía:
Según la teoría del desarrollo de Erikson (1963), los adolescentes buscan construir su identidad y ganar autonomía. En contextos de separación, es común que desarrollen una fuerte inclinación hacia la independencia, resistiéndose en ocasiones a la autoridad parental para reforzar su sentido de autodeterminación. La alianza con un hermano mayor puede amplificar esta independencia, especialmente si el hermano mayor modela conductas de autonomía o desafío hacia la autoridad.
Sensibilidad Emocional:
La separación de los padres puede hacer que algunos adolescentes desarrollen una mayor sensibilidad emocional y una tendencia a ser introspectivos. Estos jóvenes suelen ser empáticos y protectores con sus hermanos menores, fortaleciendo el lazo fraterno y transformándolo en un espacio de apoyo mutuo. Al mismo tiempo, esta sensibilidad puede hacer que sean más reactivos frente a los conflictos familiares, generando en ellos ansiedad o frustración.
Necesidad de Aceptación y Pertenencia:
En esta etapa, los adolescentes buscan aceptación en sus círculos cercanos, y la relación con los hermanos mayores se convierte en un recurso importante para satisfacer esa necesidad. Al vivir la misma experiencia de separación, el adolescente se siente comprendido y respaldado, lo que refuerza su identidad y sentido de pertenencia. No obstante, esta búsqueda de pertenencia en la relación fraterna puede hacer que dependa emocionalmente del hermano, limitando su capacidad para confiar en los padres.
2. Características de la Alianza con los Hermanos Mayores
Apoyo Emocional y Unidad:
Los hermanos mayores se convierten en confidentes y figuras protectoras para los menores, especialmente en familias donde los padres están separados. Según Bank y Kahn (1982), la alianza fraterna se refuerza en estos contextos, brindando un "refugio emocional" en el que los adolescentes pueden sentirse comprendidos y protegidos.
Modelado de Conductas y Valores:
Los adolescentes observan a sus hermanos mayores para obtener orientación sobre cómo manejar la separación parental. Si el hermano mayor actúa con resiliencia y aceptación, es probable que el adolescente emule estas actitudes. Sin embargo, si el hermano mayor se muestra desafiante, el adolescente puede adoptar una postura similar, lo que puede complicar la relación con los padres y su capacidad de aceptar límites.
Fortalecimiento de la Identidad:
Erikson (1963) explica que en la adolescencia se busca formar una identidad propia. Tener un hermano como aliado permite una identidad compartida que refuerza su sentido de pertenencia, lo cual puede ser una ventaja emocional para ambos. Sin embargo, también puede fomentar una dependencia emocional que afecte la relación con los padres.
3. Dinámicas de Poder y Autoridad en la Relación Fraterna
Compensación de la Autoridad Parental:
Tras la separación, la autoridad parental puede sentirse debilitada o inestable. Los hermanos mayores a menudo asumen roles de autoridad que, aunque ofrecen contención, pueden ser confusos para el adolescente, quien podría percibir al hermano como una "figura de autoridad alternativa". Minuchin (1974) sostiene que, cuando la estructura familiar cambia, los hermanos tienden a reorganizar sus roles, lo cual puede afectar la percepción de autoridad y límites hacia los padres.
Alianzas como Espacios de Refugio y Rebeldía:
Bronfenbrenner (1979) indica que, en situaciones familiares adversas, los hermanos suelen unirse para enfrentar la situación, lo que puede llevar a que ambos desafíen la autoridad de los padres. Esto refuerza su autonomía y les proporciona un sentido de control, aunque también puede complicar el respeto hacia las figuras de autoridad en el hogar.
4. Estrategias para los Padres:
¿Cómo Enfrentar la Alianza entre Hermanos y Fortalecer el Vínculo con los Hijos?
Para los padres, mantener un equilibrio que respete el vínculo fraterno sin perder su rol de autoridad es esencial. Algunas estrategias recomendadas incluyen:
Fomentar el Diálogo Abierto y Empático:
Crear un espacio seguro para que los adolescentes expresen sus sentimientos y opiniones sobre la separación y la relación con sus hermanos puede facilitar la aceptación de límites y normas en el hogar.
Establecer Límites Consistentes y Realistas:
La consistencia en la disciplina y las normas es clave para que el adolescente respete la autoridad de ambos padres. Esto también ayuda a aclarar que el hermano mayor no reemplaza la figura de autoridad parental, evitando que el adolescente perciba a sus padres como figuras débiles.
Reforzar el Vínculo con Cada Hijo Individualmente:
Dedicar tiempo a cada hijo de forma individual fortalece el vínculo entre padres e hijos, promoviendo el respeto y la confianza. Esta relación individual permite que el adolescente valore el rol de sus padres sin que la alianza fraterna se perciba como una alternativa a la figura parental.
Psicoeducación sobre Roles y Responsabilidades:
A través de terapia familiar, los hermanos pueden comprender mejor sus roles y evitar sobrecargarse emocionalmente. La intervención psicológica fomenta una relación fraterna saludable y equilibrada, promoviendo una alianza que sea un recurso emocional, sin afectar el respeto a la autoridad.
5. Conclusión
La separación y reorganización familiar no solo impactan a los adolescentes, sino que también presentan desafíos considerables para los padres. Enfrentar esta situación implica para los progenitores navegar entre el deseo de brindar un entorno de apoyo emocional para sus hijos y la necesidad de mantener una estructura de límites y autoridad coherente. La alianza entre hermanos, especialmente cuando el hermano mayor asume un rol de apoyo o incluso de autoridad alternativa, puede convertirse en una fuente de alivio emocional para los adolescentes. Sin embargo, también puede intensificar las dificultades para los padres en mantener su rol parental, lo que aumenta el nivel de estrés familiar.
Para los padres, esta situación puede ser particularmente agotadora, ya que enfrentan la presión de brindar estabilidad emocional en medio de la separación. La posibilidad de que los adolescentes desafíen su autoridad o se alejen emocionalmente hacia la alianza fraterna genera tensiones adicionales. Además, el padre que se sienta “más distante” de los hijos, o perciba que la alianza entre hermanos se convierte en una alternativa a su presencia, puede experimentar sentimientos de inseguridad y angustia.
Esta situación también incrementa la responsabilidad emocional sobre los padres, quienes deben esforzarse para mantenerse presentes y equilibrar sus interacciones con cada hijo de forma individual. Esto requiere una dedicación de tiempo y energía que, en contextos de separación, puede ser difícil de ofrecer debido a las propias cargas emocionales que la separación les impone. El estrés, en este caso, no solo deriva del cambio en la estructura familiar, sino también de la adaptación necesaria para que los padres sigan ejerciendo su rol de manera efectiva y coherente.
Desde una perspectiva psicológica, es fundamental que los padres también busquen espacios de apoyo, ya sea a través de terapia individual, terapia familiar o grupos de apoyo, donde puedan abordar sus propias emociones y desafíos. Reconocer el estrés que implica esta situación y trabajar en estrategias de autocuidado permite a los padres fortalecer sus recursos personales y relacionales, lo cual, a su vez, mejora su capacidad para ofrecer a sus hijos el apoyo necesario.
En resumen, el rol de los padres en un contexto de separación implica adaptarse a las nuevas dinámicas familiares, especialmente cuando las alianzas entre hermanos se vuelven más fuertes. Aunque estas alianzas pueden ser una fuente de apoyo emocional para los adolescentes, también desafían la autoridad y el rol parental, incrementando el estrés en los padres. La clave está en que los progenitores mantengan una comunicación abierta y asertiva, establezcan límites claros y consistentes, y busquen apoyo para ellos mismos en este proceso de adaptación. La resiliencia de los padres se convierte así en un pilar fundamental, no solo para el bienestar de los adolescentes, sino para la estabilidad de toda la familia.
6. Bibliografía
Bank, S., & Kahn, M. (1982). The Sibling Bond. Basic Books.
Minuchin, S. (1974). Families and Family Therapy. Harvard University Press.
Erikson, E. H. (1963). Childhood and Society. W.W. Norton & Company.
Bronfenbrenner, U. (1979). The Ecology of Human Development: Experiments by Nature and Design. Harvard University Press.
Bowlby, J. (1969). Attachment and Loss: Attachment. Basic Books.




Comentarios